Ir al contenido principal

Sumo otro tatuaje, el más bonito de todos

Todas las edades tienen primeras veces. Yo las tengo a los 40 y seguiré teniéndolas en los que me queden y hace poco mi madre también tuvo una primera vez a sus 60 ¿no es fantástico?

Mi hermana y yo queríamos vincularnos de forma simbólica con un tatuaje, ya que ambas tenemos apellidos diferentes (yo cambié los míos a los 18 años), tampoco estaba de más. Ella es una de las personas más importantes de mi vida, fue mi primera amiga y la más fiel y me ha hecho rabiar más que nadie del planeta. Pero jamás perderá su lugar en mi corazón.

Una de las veces que estuvimos comentando la posibilidad de marcarnos con sendos dibujos, mi madre prestó atención. Supongo que poco a poco sembramos la semilla y esta fue creciendo, hasta que, comentando una de las posibilidades, nos dijo que ella también querría hacérselo.

Mi hermana y yo estábamos tan sorprendidas que creo que tomamos la decisión en ese mismo instante.


La huella de la izquierda es de mi cosecha, pero los corazones los compartimos las tres y en el mismo sitio. Dos más grandes, por mi hermana y yo y uno central más fuerte, por mi madre.

Te aseguro que según pasaban los días y no poníamos fecha, era mi madre la que insistía. Creo que me encantó eso; las ganas de hacer algo así, de probar y de compartir eso con nosotras. Aunque no creo que haya nada en el mundo que ella no hiciera por nosotras, pero aun así me gustó mucho.

Este es el más bonito de todos mis tatuajes.


Comentarios

Publicar un comentario

¿Te ha gustado? Dime cosas.

Entradas populares de este blog

Vivir en un pueblo con calma: maternidad, silencio y raíces

Vivir en un pueblo es una idea que a muchos de nosotros nos resultaba cada vez más atractiva, sobre todo después de la pandemia, pero no necesariamente motivada por eso. También el bullicio, los precios, la escasez de oferta inmobiliaria y otros factores han influido. Y sí, déjame decirte que siempre es una buena idea, aunque no apta para todo el mundo. La vida rural funciona a otro ritmo y eso se respira en el aire, sin duda. En algunos aspectos, es como trasladar tu paz mental a tu contexto más cercano o retroalimentar esa paz interior con un exterior acorde e inspirador. Al final ambas cosas pueden ser dependientes. Además, en la mayor parte de los pueblos hay un porcentaje de viviendas que solo se usan los fines de semana (o en vacaciones), por aquellos que huyen de las ciudades y prefieren pasar sus días de descanso en entornos más tranquilos y que les ayuden a desconectar, a dormir mejor y a disfrutar de una tranquilidad que no es fácil encontrar en los entornos urbanos. Y eso se...

Lo que me salvó cuando toqué fondo (y cómo empezar de cero sin fingir que estás bien)

Hay momentos en los que ni el café es capaz de arreglar la situación, ni las frases motivadoras, ni las ganas de seguir como si todo fuera normal, haciendo lo de siempre y dejándote arrastrar por la inercia de la vida.  Para algunas puede que el maquillaje sea un salvavidas para esconderse del mundo Pero yo no tengo ese recursos porque ni sé maquillarme ni suelo hacerlo y las pocas veces que me pongo rímel acabo frotándome los ojos antes de salir de casa. Pero ¿qué pasa cuando tocas fondo, pero tienes que seguir cuidando de otros, trabajando o sonriendo?  Es duro, lo sé, creo que en ese momento de lucidez en el que cuerpo y mente se alían para decirte que no puedes seguir así, que no puedes soportar más esa situación, que necesitas liberarte o escapar o gritar o cambiar de vida o desaparecer, es en ese momento cuando oyes el chasquido final en el pozo y entiendes que eso es y tiene que ser el final de tu caída. Porque funcionar en automático a veces te salva. Te ayuda a curart...

Cómo una rutina puede cambiar tu vida (aunque no lo creas)

Así es, tu rutina es más poderosa de lo que crees y tiene una cierta capacidad sanadora, aunque parezca que siempre usemos esta palabra con connotaciones peyorativas: la rutina. Es como decir "otra vez lo mismo", ¿no suena a algo así? Si tú también piensas de esta forma, vamos a ver si juntas podemos darle la vuelta a la maltrecha rutina y encontrar su utilidad práctica y funcional en tu vida. Cómo me salvó la rutina en plena pandemia Déjame contarte que, durante la pandemia, a mí me salvo la rutina y me aportó lucidez mental, estructura y propósito. Entonces descubrí los beneficios de una rutina diaria: estructura, enfoque y bienestar emocional. Porque en aquellos días encerrados en casa, además del desconcierto, los divorcios, las peleas y los insomnios estaban a la orden del día. De hecho, la simple (y no tan simple) prohibición de salir de casa, salvo en las situaciones imprescindibles (comprar y pasear al perro), nos estaba desquiciando. Primero, porque nunca habíamos vi...