Buenos días y buenas tardes ¿más vegetación en casa? Pues sí, estoy romántica. Es lo que tiene llevar 20 días aquí dentro, que empiezas a tener ideas locas como hacer que tu hogar sea más cómodo, saludable y bonito. Sobre todo para hacer nuestra estancia en él más agradable.
Ideas verdificadoras que le surgen a una. Y es que he sabido de un invernadero de Turís que está ahora mismo ofreciendo plantas a 1 € con envío gratis para liberarse del stock que tiene acumulado por la falta de clientes en estos días. Por otro lado, también he estado leyendo diversas noticias que recomiendan ambientes con cierto grado de humedad para cargarse los bichos más fácilmente. Ya sabéis que este bicho-virus nuestro no se transmite por el aire, pero le mola posarse en diversas superficies, así que es bien que, mientras mejoremos la estancia para nosotros, se la compliquemos a él.
Una de las plantas que he visto que parece ser la más recomendable (incluso por la NASA, por si queréis buscarla también) es la Sanseviera, Rabo de tigre o lengua de suegra (esta última denominación popular no me digáis a qué se debe porque no le encuentro yo el parecido práctico).
Es una planta de hojas largas y firmes con diferentes tonos de verde, que humidifica el aire, genera bastante oxígeno (parece que más que la media y por eso la NASA la recomienda incluso para poner en el dormitorio) y neutraliza las evaporaciones nocivas que puedan emitir los materiales sintéticos ¡un chollo! Yo añado que no se muere fácilmente, porque yo tengo una y solo la riego cuando me acuerdo y sigue creciendo, así que para mí es una de las plantas ideales, junto con los cactus.
Muchas veces he pensado lo chulo que sería convertir mi piso en un vergel, con helechos en el baño (necesitan ambientes muy húmedos) y plantas en lugar de cuadros en mi habitación, en el comedor y en la cocina. Me encantaría. Aunque mi potencial homicida es considerable, así que voy muy poco a poco. De momento me vale con que sobrevivan los cactus y la lengua de suegra esta, antes de pasar al siguiente nivel.
¿Tú habías pasado tanto tiempo seguido en tu casa antes? Es un peligro, ya te lo digo. Tenemos tiempo de sobra para escrutar todos los rincones habidos y por haber y, en la otra mano, Amazon y otros comercios a tiro de clic.
Ahora es cuando surge eso de pintar tal habitación, cambiar ese mueble, comprar las fundas que quería poner o buscar algo que me haga tal cosa más cómoda ¡un auténtico peligro!
Solo puedo decir a esto ¡¡resisteeeeeeeeeeeeeeeeee!! Ahora hay que racionar el dinero tanto o más que la comida, a la vez que buscamos nuevas fuentes de ingresos, por lo que pueda pasar...
Me tienta también echar un vistazo a mi armario. De momento yo no estoy engordando en estos días, a pesar de la cerveza, pero estamos cerca de un cambio de estación y poder sentarme, probarme y decidir con calma qué prendas se quedan en mi armario y cuáles no ¡es un chollo! ¿Alguna vez has dedicado tanto tiempo a algo así?
Yo soy esencialmente práctica y me gusta ir cómoda, además mi estilo es bastante clásico, sin brillos ni florituras, pero también caigo con frecuencia en la tentación de recurrir a mis clásicos; ciertas combinaciones que me gustan y que repito constantemente. Por eso me parece interesante el poder sentarme un día y ver tooooodo lo que esconde mi armario y recuperar esas prendas que tengo por ahí olvidadas.
Aclaro: "poder sentarme", esto ya implica procastinación, porque desde que empezó esta semilla a crecer en mi cabeza hasta hoy, sigo sin encontrar ese tiempo para "poder sentarme". En fin, que es un proyecto para estos días... Falta ver si se materializa.
Realmente tenemos todo lo que necesitamos, aunque estemos privados de "cierta" libertad, pero no podemos quejarnos de nada y es de agradecer cómo están respondiendo muchas empresas y proveedores, ofreciendo libros, revistas o películas gratis y confeccionando pantallas y mascarillas de forma altruista para abastecer a hospitales. Incluso hay gente que se ofrece a hacer la compra a las personas más mayores ¡no puedo sentirme más enamorada de mi país y de su gente de lo que lo estoy ahora!
Yo me pongo la servicio de mi gente y de quien lo necesite para asesorarle en cuanto a su imagen digital y opciones que puede poner en marcha para reconducir, gestionar o relanzar su empresa. Si te sirve ¡te ayudo!
Me sabe mal la situación de aislamiento real que están viviendo las personas que encuentran en hospitales y UCI,s. Ellos sí que están encerrados de verdad y sin medios para distraer sus pensamientos y malestar. Me encantaría poder ayudar de alguna manera y si estos pequeños textos que paso cada día les pudieran animar o distraer, al menos durante un ratito, sería fantástico.
No debe ser fácil mantener una buena actitud en esas circunstancias y ya sabes que ese es uno de los pilares de la curación, por eso me parece tan necesario poder ofrecerles cualquier tipo de distracción o abstracción de su realidad.
Todo irá bien, verás que esto también pasará.
¿Algo positivo? Que mi gata ya me tolera, no puedo decir que me quiera porque ahora mismo soy como su concubina, pero algo es algo.
Bueno, yo tengo dos Sphynx; Cleopatra que cumple 9 años en julio y su hijo Atila que cumplirá 7 el mismo mes, pero hace unos meses recogí a una peluda de la calle (a través de una protectora). El caso es que estaba en una clínica veterinaria asociada. Allí la revisaron y la hospedaron un par de semanas.
En ese tiempo yo fui a visitarla tres veces, en realidad a visitarlo, porque me dijeron que era un macho y que le habían puesto de nombre Silvestre. Un gatito pelirrojo y chiquitito bastante antipático que le bufaba a todo y a todos. Sin duda pasó unos primeros meses de vida muy duros en la calle y me comentaron que no sería fácil que cogiera confianza ¡vaya tela!
Cuando me traje a casa a Silvestre lo mantuve separado de los míos y fui juntándolos a ratitos y poco a poco. Así también sería más fácil para ellos tres, que ahora tendrían que compartir piso porque lo digo yo ¡pobres! Ni les pedí opinión ni na de na.
Desde diciembre del año pasado llevo intentando que Silvestre y yo nos hagamos amigos y no os podéis imaginar la odisea. Cada vez que me muevo sale corriendo, sobre todo si me acerco a él y hasta hace como un mes apenas me dejaba tocarle siquiera. Lo curioso fue más o menos entonces, hará como un mes, cuando empezó a sentarse cerca de mí en el sofá y a levantarme el culet.
De primeras no me pareció un gesto muy masculino, todo hay que decirlo, pero eso pasó un viernes y yo tenía cita el sábado (justo al día siguiente) para ir a esterilizarlo al veterinario. El caso es que esa noche, no sé si se lo olió o qué, pero estaba raruno. Seguía con el tema este de levantarme el culo y cada vez se ponía más cerca.
Yo me arriesgué y traté de acariciarlo y, aunque al principio no parecía del todo convencido, luego se dejó tocar y empezó a acercarse cada vez más, hasta que me puso el culo en primera plana y ¡olé! ¿Dónde están los huevos de este gato? Va a ser que no es un macho.
Fui a consultar la cartilla que me había dado la veterinaria y estaba correcta: macho de nombre Silvestre. Pero volví a mirarlo bien de cerca y no, de macho nada ¡esto es una hembra!
Corriendo a llamar al veterinario para anular la cita y esperar a que se le fuera el celo. Además, con las hembras es cirugía mayor y hay que programarlo para otro día porque lleva más tiempo operarlas.
Increíble. Primero que ni en la protectora ni la veterinaria que me lo dio se dieran cuenta y segundo que hasta el momento yo le había tratado como a un chico (espero no haberle creado trauma alguno a la pobre).
A pesar de todo he decidido llamarle Peluda, simplemente, porque es un poco rancia conmigo todavía (aunque ahora que vuelve a estar en celo sí que me busca la tía, sí) y porque es mi primer gato con pelo y no veas cómo se nota. Estamos Cleopatra, Atila y yo envueltos en pelos todo el día solo de los que suelta la enana esta diminuta ¡qué barbaridad! Para que luego me bufe hasta cuando le pongo la comida en el cuenco.
¿El lado positivo? Ya no soy la única que dejas pelos por casa.
Ideas verdificadoras que le surgen a una. Y es que he sabido de un invernadero de Turís que está ahora mismo ofreciendo plantas a 1 € con envío gratis para liberarse del stock que tiene acumulado por la falta de clientes en estos días. Por otro lado, también he estado leyendo diversas noticias que recomiendan ambientes con cierto grado de humedad para cargarse los bichos más fácilmente. Ya sabéis que este bicho-virus nuestro no se transmite por el aire, pero le mola posarse en diversas superficies, así que es bien que, mientras mejoremos la estancia para nosotros, se la compliquemos a él.
Una de las plantas que he visto que parece ser la más recomendable (incluso por la NASA, por si queréis buscarla también) es la Sanseviera, Rabo de tigre o lengua de suegra (esta última denominación popular no me digáis a qué se debe porque no le encuentro yo el parecido práctico).
Es una planta de hojas largas y firmes con diferentes tonos de verde, que humidifica el aire, genera bastante oxígeno (parece que más que la media y por eso la NASA la recomienda incluso para poner en el dormitorio) y neutraliza las evaporaciones nocivas que puedan emitir los materiales sintéticos ¡un chollo! Yo añado que no se muere fácilmente, porque yo tengo una y solo la riego cuando me acuerdo y sigue creciendo, así que para mí es una de las plantas ideales, junto con los cactus.
Muchas veces he pensado lo chulo que sería convertir mi piso en un vergel, con helechos en el baño (necesitan ambientes muy húmedos) y plantas en lugar de cuadros en mi habitación, en el comedor y en la cocina. Me encantaría. Aunque mi potencial homicida es considerable, así que voy muy poco a poco. De momento me vale con que sobrevivan los cactus y la lengua de suegra esta, antes de pasar al siguiente nivel.
¿Tú habías pasado tanto tiempo seguido en tu casa antes? Es un peligro, ya te lo digo. Tenemos tiempo de sobra para escrutar todos los rincones habidos y por haber y, en la otra mano, Amazon y otros comercios a tiro de clic.
Ahora es cuando surge eso de pintar tal habitación, cambiar ese mueble, comprar las fundas que quería poner o buscar algo que me haga tal cosa más cómoda ¡un auténtico peligro!
Solo puedo decir a esto ¡¡resisteeeeeeeeeeeeeeeeee!! Ahora hay que racionar el dinero tanto o más que la comida, a la vez que buscamos nuevas fuentes de ingresos, por lo que pueda pasar...
Me tienta también echar un vistazo a mi armario. De momento yo no estoy engordando en estos días, a pesar de la cerveza, pero estamos cerca de un cambio de estación y poder sentarme, probarme y decidir con calma qué prendas se quedan en mi armario y cuáles no ¡es un chollo! ¿Alguna vez has dedicado tanto tiempo a algo así?
Yo soy esencialmente práctica y me gusta ir cómoda, además mi estilo es bastante clásico, sin brillos ni florituras, pero también caigo con frecuencia en la tentación de recurrir a mis clásicos; ciertas combinaciones que me gustan y que repito constantemente. Por eso me parece interesante el poder sentarme un día y ver tooooodo lo que esconde mi armario y recuperar esas prendas que tengo por ahí olvidadas.
Aclaro: "poder sentarme", esto ya implica procastinación, porque desde que empezó esta semilla a crecer en mi cabeza hasta hoy, sigo sin encontrar ese tiempo para "poder sentarme". En fin, que es un proyecto para estos días... Falta ver si se materializa.
Realmente tenemos todo lo que necesitamos, aunque estemos privados de "cierta" libertad, pero no podemos quejarnos de nada y es de agradecer cómo están respondiendo muchas empresas y proveedores, ofreciendo libros, revistas o películas gratis y confeccionando pantallas y mascarillas de forma altruista para abastecer a hospitales. Incluso hay gente que se ofrece a hacer la compra a las personas más mayores ¡no puedo sentirme más enamorada de mi país y de su gente de lo que lo estoy ahora!
Yo me pongo la servicio de mi gente y de quien lo necesite para asesorarle en cuanto a su imagen digital y opciones que puede poner en marcha para reconducir, gestionar o relanzar su empresa. Si te sirve ¡te ayudo!
Me sabe mal la situación de aislamiento real que están viviendo las personas que encuentran en hospitales y UCI,s. Ellos sí que están encerrados de verdad y sin medios para distraer sus pensamientos y malestar. Me encantaría poder ayudar de alguna manera y si estos pequeños textos que paso cada día les pudieran animar o distraer, al menos durante un ratito, sería fantástico.
No debe ser fácil mantener una buena actitud en esas circunstancias y ya sabes que ese es uno de los pilares de la curación, por eso me parece tan necesario poder ofrecerles cualquier tipo de distracción o abstracción de su realidad.
Todo irá bien, verás que esto también pasará.
¿Algo positivo? Que mi gata ya me tolera, no puedo decir que me quiera porque ahora mismo soy como su concubina, pero algo es algo.
Bueno, yo tengo dos Sphynx; Cleopatra que cumple 9 años en julio y su hijo Atila que cumplirá 7 el mismo mes, pero hace unos meses recogí a una peluda de la calle (a través de una protectora). El caso es que estaba en una clínica veterinaria asociada. Allí la revisaron y la hospedaron un par de semanas.
En ese tiempo yo fui a visitarla tres veces, en realidad a visitarlo, porque me dijeron que era un macho y que le habían puesto de nombre Silvestre. Un gatito pelirrojo y chiquitito bastante antipático que le bufaba a todo y a todos. Sin duda pasó unos primeros meses de vida muy duros en la calle y me comentaron que no sería fácil que cogiera confianza ¡vaya tela!
Cuando me traje a casa a Silvestre lo mantuve separado de los míos y fui juntándolos a ratitos y poco a poco. Así también sería más fácil para ellos tres, que ahora tendrían que compartir piso porque lo digo yo ¡pobres! Ni les pedí opinión ni na de na.
Desde diciembre del año pasado llevo intentando que Silvestre y yo nos hagamos amigos y no os podéis imaginar la odisea. Cada vez que me muevo sale corriendo, sobre todo si me acerco a él y hasta hace como un mes apenas me dejaba tocarle siquiera. Lo curioso fue más o menos entonces, hará como un mes, cuando empezó a sentarse cerca de mí en el sofá y a levantarme el culet.
De primeras no me pareció un gesto muy masculino, todo hay que decirlo, pero eso pasó un viernes y yo tenía cita el sábado (justo al día siguiente) para ir a esterilizarlo al veterinario. El caso es que esa noche, no sé si se lo olió o qué, pero estaba raruno. Seguía con el tema este de levantarme el culo y cada vez se ponía más cerca.
Yo me arriesgué y traté de acariciarlo y, aunque al principio no parecía del todo convencido, luego se dejó tocar y empezó a acercarse cada vez más, hasta que me puso el culo en primera plana y ¡olé! ¿Dónde están los huevos de este gato? Va a ser que no es un macho.
Fui a consultar la cartilla que me había dado la veterinaria y estaba correcta: macho de nombre Silvestre. Pero volví a mirarlo bien de cerca y no, de macho nada ¡esto es una hembra!
Corriendo a llamar al veterinario para anular la cita y esperar a que se le fuera el celo. Además, con las hembras es cirugía mayor y hay que programarlo para otro día porque lleva más tiempo operarlas.
Increíble. Primero que ni en la protectora ni la veterinaria que me lo dio se dieran cuenta y segundo que hasta el momento yo le había tratado como a un chico (espero no haberle creado trauma alguno a la pobre).
A pesar de todo he decidido llamarle Peluda, simplemente, porque es un poco rancia conmigo todavía (aunque ahora que vuelve a estar en celo sí que me busca la tía, sí) y porque es mi primer gato con pelo y no veas cómo se nota. Estamos Cleopatra, Atila y yo envueltos en pelos todo el día solo de los que suelta la enana esta diminuta ¡qué barbaridad! Para que luego me bufe hasta cuando le pongo la comida en el cuenco.
¿El lado positivo? Ya no soy la única que dejas pelos por casa.
Comentarios
Publicar un comentario
¿Te ha gustado? Dime cosas.